lunes, 3 de septiembre de 2012

Despedida de una escritora desesperanzada.

Dónde están mis ganas e ilusiones por escribir?
Dónde esta mi prodigioso talento que la vida me brindó?ya no tengo la satisfacción que me daba escribir, únicamente me centro en el futuro y me asquea la idea de que el saber escribir bien, el saber llegar al corazón de cualquiera y movilizar neuronas no me servirá de nada ni me dará de comer en un futuro cercano.
Me siento inútil a la hora de escribir, únicamente escribo cosas "poco alegres" pero que le voy a hacer si la vida no me da más que esto?.
Posiblemente me de miedo aburrir a la gente con mis desgracias y por eso me he rendido con el tema de escribir, aunque sinceramente muy pocas veces me he visto en la situación de escribir cosas alegres simplemente porque esas opciones no han estado o porque no tenía tiempo.
A donde pretendo llegar con todo esto? ni yo lo se, simplemente intento encontrar un sentido un "algo"  que me motive a escribir y no sentir que es en vano, ni tampoco sentir que escribo sin ser leída sin ser escuchada.
Mi principal objetivo es compartir mis ideales, mi filosofía de vida, las pocas cosas que consigo vivir, de las que puedo hablar con la satisfacción de saber que se sobre lo que escribo.
Pero parece ser que esto únicamente queda entre mi blog yo y esos lectores que creía existentes pero que al parecer, no se encuentran en ninguna parte.
E aquí la despedida de una artista incomprendida que no encuentra lugar en un mundo en el que cualquiera se hace llamar escritor sin merecerlo, colapsando a los que de verdad tenemos talento.
E aquí el adiós de una artista que derrochará su talento escribiendo tristemente en una pizarra de bar el menú del día con faltas de ortografía.
Esto último ha podido causaros risa, pero es una metáfora en la que intento plasmar que haga lo que haga no será lo que quiera realmente, no si no es escribir, cayendo en el repetitivo día a día al que me enfrento en el que no encontrare sentido a nada cayendo en esas cadenas a las que muchos se han atado, a las que muchos se han rendido.
Esas vidas monótonas en las que uno se da cuenta que no esta haciendo nada con su efímera vida y  siente que todos los días son iguales.
Pero la vida es así, de ilusiones ni sueños uno consigue comer.
Y por mucho que duela toca ser realista y satisfacer a la gente de mi entorno buscando otras opciones que no sean escribir, opciones con futuro asegurado dejando ver que con suerte no acabaré siendo una fracasada, pudiéndome sentar en una silla de oficina, ganando un sueldo a costa de mi ausente felicidad;
y no escribiendo un libro que posiblemente acabe al fondo de una estantería de librería de mala muerte al que le han rebajado un 50% el precio debido a su poco éxito de venta, o peor aún en una biblioteca pública perdido en el pasillo de libros sin sección que nadie lee, cogiendo polvo hasta el fin de los tiempos.
No voy a seguir perdiendo el tiempo en algo sin futuro, malgastando mi tiempo en algo en lo que nadie confía en lo que nadie me apoya en algo que todo el mundo considera como un tonto "hobbie" pasajero de adolescente que en un año o incluso menos pasará.
Talento que posiblemente sea comparado con el de esas estúpidas niñas que escriben blogs inútiles 
haciendo que parezca que todo el mundo puede escribir pero no es así, apenas nadie puede.
sabéis por qué? porque yo en mi caso he sido constante con esto y le llevo dedicando toda mi vida a la escritura desde que tengo memoria he estado escribiendo textos y demás, no es algo ni un saber que de la noche a la mañana  aparece, es un "don" con el que naces, algo que se tiene o no se tiene.
Para terminas os diré que:
Nunca nadie me tomo enserio, como así me lo iba a tomar enserio yo?
E aquí mi fin, e aquí el punto final que nunca supe donde colocar.
E aquí mis ultimas letras, mis ultimas palabras como escritora aficionada que nunca vio sus frutos florecer.
E aquí mi carta de renuncia de una carrera de unos sueños que nunca fueron existentes. 
E aquí una cobarde tirando la toalla aun sin haber comenzado.
E aquí el fin de mi refugio donde podía dejar volar mi creatividad.
Es la forma más madura para comenzar a madurar.
Decir adiós a sueños inútiles que no te llevan a ninguna parte.




Adiós.